La atención plena, simplemente dicho, significa prestar plena atención al momento presente y a lo que sucede dentro de uno mismo y su entorno sin prejuicios.
Se puede desarrollar a través de la meditación.
Lograr la atención plena es bastante sencillo. Uno tiene que prestar atención a sus pensamientos y sentimientos sin juzgar su significado para no creer que hay una forma correcta o incorrecta de sentir y pensar en un momento dado.